Cada día es mayor la cantidad de pacientes de Covid-19 que llega hasta este hospital que durante varias semanas se ha mantenido lleno, tanto en las salas de internamiento como en la Unidad de Cuidados Intensivos.
Aunque no podíamos obtener datos oficiales sobre el número de pacientes ingresados, la cantidad de familiares que a las afueras espera por noticias evidencia lo caótica que es la situación.
Joselin Familia, narra la angustia que durante tres días ha vivido a la espera de una cama para su prima embarazada, quien está recibiendo atenciones en una silla. Mientras que Yahaira Montero, tuvo llevar una silla tipo sheilon a su madre, una señora de la tercera edad, con un cuadro de salud delicado.
“Mi madre estaba en una silla hace dos días una de 67 años y le traje algo para que se acueste, un sheilón, está con oxígeno no se ha podido parar muy precaria la situación”, aseguró Joselin Familia.
“Bastante difícil conseguir cama, aquí hay pacientes con más de una semana sentados en una silla porque no hay cama, yo tengo a mi prima aquí hace tres días esperando una cama, ella está embarazada y tiene neumonía”, agregó Yahaira Montero.
Al igual que ellas, narran su angustia otros familiares, quienes en los últimos días han hecho de las afueras de la emergencia del Marcelino Vélez su casa, pues aunque los médicos les dicen que pueden marcharse y volver al día siguiente, no se sentirían tranquilos si se marcharan.
“Tengo un familiar ingresado ahí y estoy haciendo diligencia para llevarlo porque tienen dos días sentado en una silla y se me está haciendo muy difícil”, dijo el señor Víctor Lucio.
Otros reciben consuelo y se regocijan al ver asomarse por las ventanas a algunos de los pacientes ingresados, quienes aún en sus momentos difíciles mandan señales de mejoría.
De acuerdo al director del Servicio Nacional de Salud, Mario Lama, se ha registrado un rebrote más agresivo, situación que atribuye a la mutación de la enfermedad y la irresponsabilidad de la población.
Fuente: Proceso
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